Nueces, frutos secos que enriquecen a la cocina mexicana

 

Es una especie originaria de Europa y Asia, la cual también se cultiva abundantemente en los climas templados de México.

La temporada de recolección es del mes de junio a octubre. Existe la nuez de castilla y la pecana.

La nuez de castilla es llamada así porque dicha especie de nogal fue traída de España alrededor del año 1539. Se sembró en el huerto del Convento Franciscano de Calpan, en el Estado de Puebla y prosperaron como en ningún otro lugar.

Esta es de cascara corrugada y de un sabor neutro, por lo que se puede utilizar en una gran variedad de guisos. Destaca en salsas, moles, postres y en uno de los platillos más emblemáticos de la cocina mexicana, “Chiles en Nogada”. Para la preparación de la nogada se requiere de muchas de ellas y poner gran empeño en que esta no se oxide, para ello es recomendable ponerla en agua o leche, una vez que se le ha retirado la cáscara, también se le quita la piel delgada, la cual tiene un sabor amargo y puede llegar a arruinar cualquier guiso.

La nuez de castillas es rica en antioxidantes, tiene altos niveles de fibra, contiene proteínas, grasas saludables, hidratos de carbono, Omega 3, fosforo, lecitina, y vitaminas del grupo B.

La nuez pecana o de cáscara de papel, es una de las que más se consume, es de piel suave y de un sabor dulce. México goza de una gran producción, sobre todo en los estados de Nuevo León y Coahuila, aunque el mayor productor es Chihuahua.

Es la que más se consume a nivel mundial y es la más utilizada, tanto en platillos dulces y salados. En las calles de México suelen venderlas algunos productores, que las portan en delgados costales de manta.

Las nueces pecanas aportan al organismo una cantidad de grasa saludables, minerales, vitamina E, fibra, Omegas 6 y 9, reducen el colesterol, estrés y el riesgo de hipertensión.

Una buena cantidad al día aporta cinc, selenio, minerales antioxidantes y minerales del grupo B.

En la cocina mexicana existen gran variedad de preparaciones que salieron de los conventos, como los besos de nuez, tartas, mazapanes, mazapanes y jamoncillos, estos últimos son dulces típicos con leche y nuez.

Así que ha consumir una buena porción de nueces al día, así como también se puede preparar gran variedad de alimentos, lechadas, incluirlas en batidos, elaborar ricos pestos o añadirlas a las ensaladas.

Pesto de nuez

40 gramos de nueces

Hojas de albahaca fresca al gusto

50 gramos de queso parmesano rallado muy fino

½ diente de ajo

Aceite de oliva el necesario

Sal al gusto

 

PREPARACIÓN

 

Mezclar perfectamente los ingredientes, ya sea en licuadora o en un procesador de semillas.