Los enigmas del café turco

La lectura del café turco encierra misteriosas revelaciones del futuro, asuntos del corazón, temores y presentimientos.

No cebe dura que el mundo del café es enigmático. Aparte de estar rodeado de historias y leyendas, también tiene caminos desconocidos y universos misteriosos.

¿Qué hay detrás de la adivinación del café, qué significado tienen las líneas, círculos y algunas formas indefinidas? ¿Realmente da cuenta de lo que será la vida en un futuro, o de lo que fue en el pasado? “Durante muchos años se ha realizado la lectura del café y a través de esta se pueden ver en el fondo de la taza la muerte de un ser querido. Para la lectura no hay reglas, esta lectura se rige por el don de las videntes.

En primer lugar la preparación para este tipo de café debe ser especial: bien  molido, casi polvo y de color oscuro, de los contrario, queda de consistencia harinosa y no se facilita la formación de líneas para poder leerlo.

La historia del café turco, data de más de 450 años en la época de Solimán el Magnífico, Ozdemir Pasha el gobernador de Yeme, es quien lleva el café a la realeza otomana.

En aquel tiempo dos mercaderes árabes, Hakem de Alepo y Sems de Damasco, inauguran el primer café en Estambul. Más tarde el embajador turco Soliman Aga presenta esta bebida oriental ante los altos mandos y se convierte en un privilegio.

No se sabe a ciencia cierta cuándo comenzó la lectura, pero en Francia en el Siglo XIX tuvo gran auge y se le llamó 

“Cafédomancie”, pero lo que sí se sabe es que la preparación exige un cezve, que es una cafetera turca, y siempre debe ser de cobre.

Cuando se entra a los lugares de lectura, la primera pregunta de los expertos es ¿Qué se va a leer? Si es el café turco, de inmediato la vidente comienza a prepararlo.

Se sirve en una taza pequeña sobre un plato de barro para las “buenas vibras”. En seguida se sugiere que si se pone azúcar, hay que moverlo hacia la izquierda y nunca a la derecha porque la lectura no sale bien.

Una vez que se toma el café, en el fondo de la taza queda un asiento espeso. Y enseguida se pasa a un privado donde se iniciará la lectura.

La boca de la taza se coloca sobre el plato. En el momento, la vidente mueve la taza en forma circular, para provocar la formación de líneas horizontales, verticales, círculos y figuras distorsionadas que sólo ella podrá interpretar.

Tanto las figuras, como las líneas describen la forma de ser, el carácter, la familia y las personas que influyen en la vida. En general van relacionadas con la vida pasada, presente y futura.

Una cruz puede indicar cuestiones religiosas o morales, una flama simbolizar temores o presentimientos, un trazo a manera de mariposa indica la presencia de enemigos, una cabeza de caballo, buenos augurios para los asuntos del corazón y la figura de un pescado la oportunidad de reencarnar en una vida futura.

Entre los enigmas del café está el destino y la verdad de cada ser humano ya que se trata de una bebida milenaria que salió de los secretos árabes.